Hace un año...

Estaba recordando un día en mi cama, lo mucho que ha cambiado mi vida en este último año. Más ahora que se acerca mi cumpleaños (dic. 10, espero regalos, jeje), hago una retrospectiva y creo que si hace un año alguien me hubiera dicho lo que iba a estar haciendo ahorita, no lo hubiera creído.

Hace un año estaba en lo último de la prepa, mi vida también en ese entonces dió un giro radical, antes mi vida era de hueva (lo sigue siendo, pero no tanto), mi única amiga ni siquiera era mi amiga, era más bien la única persona con la que estaba en la prepa (bueno, y su novio también). Las dos éramos tan parecidas que rayaba en la incompatibilidad. No sé qué pasaba con nosotras juntas, porque nunca teníamos tema de conversación, porque era criminal tener horas libres, porque solo esperaba la última clase para por fin poder largarme a mi casa y estar lejos de ella, porque estando con ella no podía hacer nuevos amigos, por su carácter tan mamón que tenía, pero aún así no podía decir "hasta aquí" y buscar otras cosas, en parte porque no había gente chingona y también porque compartía el salón, ni cómo dejarla de ver.

Pero eso era hace dos años, hace un año, entré a sexto, en área 3, y ahí se dió el giro del que hablé. Ya no estaba con esta chava, sentía que por fin respiraba, nuevas materias, que después de años de escuela por fin llevaba las que me gustaban, nuevos amigos (y muchos), con los que podía hablar por horas, o bien podíamos estar acostadotes en el jardín viendo la vida pasar y no aburrirnos, empecé a salir a fiestas que antes ni cloroformada hubiera ido, pero con los amigos me la pasaba tan bien, que todo lo demás valía madres. Hace un año me clavé con alguien, despúes de 3 años de no sentir esa emoción, que pues sí fue correspondido, pero por bromas del destino no se concretó, y ni modo, pero en ese entonces estaba muy feliz.

Me acuerdo de mis salidas en la noche (cuando todavía me dejaban), de lo bien que la pasaba, de las experiencias que solo te da la madrugada, de los apañones de la tira, de las conversaciones entre copas, de las noches en que solo había mezcal, una lira y los amigos, de los ligues inocentes con algún desconocido, de bailar surf con algún punk y punk con algún dark, de los conciertos de ese año... -sight- qué tiempos aquellos, sin responsabilidades ni preocupaciones, puro alcohol y rock n roll...

Hoy... la cosa es muy diferente, no entré a la universidad y me metí a estudiar para maestra de inglés, a ver qué pasaba, y sin siquiera imaginarlo, hoy estoy trabajando, tengo que cumplir con un horario, preparar clases, material, etc. Ya no hay fiesta los viernes, los cuates están ocupados con las tareas, ya no estoy clavada con nadie, no salgo en las noches, no sé que voy a hacer en mi cumpleaños (el año pasado me la pasé poca madre) y ya no soy tan vale madres como antes. En la madre, estoy perdiendo mi identidad... Bueeeno, ahora tampoco soy taan responsable, pero me tengo que vestir decentemente, con pantalones de vestir y esas mamandas, aunque traigo mis tenis mugrosos en la mochila, me resisto a acostumbrarme a usar tacón, y aunque no quiera y me aferre a mi adolescencia, me pregunto, ¿esto es madurar?

PD. Avisos parroquiales: La Barranca en el Cultural Roots, con San Pascualito Rey, viernes 9 de dic. no sé a qué hora, $100.