2 de octubre no se olvida

Hoy me siento mucho mejor y lista para seguir adelante. Bueno, a lo que nos truje.

Ayer se conmemoraron los 37 años de la matanza de Tlatelolco, un movimiento represor contra los jóvenes de esos ayeres, pero con ideas en las que seguimos creyendo hoy.

Ese penoso evento fue ejecutado porque los poderosos no querían que hubiera manifestaciones ni que pasara nada, todo el chiste era mantener la farsa para que, a unos cuantos meses de llevarse a cabo las Olimpiadas en nuestro país, se viera que en México no pasaba nada, y de paso sirviera de advertencia para aquellos que osaren perturbar la paz de la ciudad.

Todo fue perfectamente planeado, con sus distintivos y todo ,se pusieron de acuerdo con la iglesia para que no hubiera modo de escapar del deseo de sangre de aquellas bestias enfundadas en traje, y por horas se escucharon tiroteos allá en el norte de la ciudad.

Hace 37 años de esto, pero este día, las heridas duelen como si se hubieran hecho ayer. Yo tengo solo 18 años (ya casi 19), mis papás eran unos chicuelos cuando ocurrió esto, pero me pongo a pensar ahora que yo soy joven, con ideales similares, con toda la vida por delante, solo buscando un lugar mejor para desarrollarse, y de repente imaginarme el terror, la angustia, la desesperanza, frustración, rabia e impotencia que vivieron ellos, en primera por ver que un paso en falso y te atravesaban con plomo y sin compasión, pero también por ver el cinismo de las autoridades de que no tienen un poquito de sentido común simplemente para no llegar a balacear a un grupo de jóvenes manifestando sus ideas, se me hace el acto más bajo que alguien puede hacer.

Ahora el gobierno lo pinta todo muy romántico, diciendo “ay si, pobres”, pero siguen haciendo lo mismo, la diferencia es que ahora sin metralletas, que ya sería el colmo si se repitiera algo así, pero nos siguen reprimiendo, la educación actual es pésima, y encima de todo nos recortan el presupuesto, no nos dejan desarrollarnos, ser libres en la forma de pensar, nos tienen enajenados con telenovelitas irreales para gente sin cerebro, los maestros son mal pagados y por la tanto hacen mal su trabajo, nos quieren hacer ver un palacio de oro en una casa de cartón, nos tienen embobados con “pan y circo”, mientras se quejan de la fuga de cerebros, en el extranjero nos ven que no podemos hacer nada bien, ¿Qué eso no es cuartarnos el desarrollo a la gente que sí queremos hacer las cosas bien??

En fin, solo nos queda alzar la voz y levantar el puño, porque nosotros no nos olvidamos de aquella traición, resiste raza, resiste.

“Vivir para ser libres, morir para dejar de ser esclavos”.

P.D. Felicidades a la Selección sub-17 (aprendan! Si se pueden hacer las cosas)